Charla con Andy Criere, oficio y talento en busca del equilibrio

Charla con Andy Criere, oficio y talento en busca del equilibrio

Andy Criere; «participar en unas olimpiadas es una evolución natural de un deporte en el que vemos que se están haciendo bien las cosas»

 

Hace pocos días se conocía la lista definitiva de los deportistas que acudirán a El Salvador y tendrán la oportunidad de pelear por una plaza en los próximos Juegos Olímpicos; Andy Criere estaba entre ellos.

 

Criere ya sabe lo que es acudir a un mundial y competir bajo la presión que exige la alta competición. También es uno de los surfistas nacionales que más se exige y que más se ha profesionalizado en su oficio, el surf. Y por si fuera poco, es uno de los perfiles que más interés suscita en la digitalización de este deporte. 

 

Andy, eres uno de los claros ejemplos de cómo el surf se ha profesionalizado y la exigencia deportiva cada día es mayor, ¿cómo ha repercutido esta profesionalización del surf en el propio deporte?

 

¡Desde luego ha sido algo súper positivo para el surf y para nosotros como surfistas! El hecho de que se profesionalice está generando muchas más oportunidades. Y, con la entrada en las olimpiadas llegamos a lo máximo que puede aspirar un deporte y un deportista. 

 

Las olimpiadas, ¿cómo afectarán?

 

Esa una nueva oportunidad para que seamos mejores deportistas, que se vea y se conozca más el surf y que llegue a más personas. Ahora más que nunca hay que trabajar más y el nivel cada vez está más alta. Participar en unas olimpiadas es una evolución natural de un deporte en el que vemos que se están haciendo bien las cosas. 

 

 

Ahora el surf está en boca de todo el mundo y en las redes sociales se intuye que hay mucha gente viviendo de esto, pero ¿son los ingresos suficientes para vivir o hay que generar nuevos puntos de vista?

 

Cada vez hay menos personas con medios suficientes para vivir del surf. Ya sea como freesurfer o como competidor. Así que, yo veo fundamental la parte de crear contenidos nuevos para llegar a más gente. Ser mejor surfista implica surfear en las mejores condiciones haya donde haya olas y tener la oportunidad de competir. Poder surfear cada día está muy relacionado con la posibilidad comunicar para llegar a la gente y eso es lo que me va a hacer que la parte privada de patrocinios se vean y al final es cómo la gente se va a identificar y a consumir.

 

¿Cómo afectó la pandemia a todo esto y a ti en particular?

 

El año pasado se pudo ver cómo a muchos de nosotros se nos ha plantado una realidad triste de masticar… ¡si no tenemos movimiento no tenemos a dónde ir a competir! Esto a mí me abrió los ojos e hizo que me preguntase, ¿cómo puedo buscar mi mejor versión como surfista? Y fue ahí donde empezó esa búsqueda del equilibrio que sea coherente con la profesionalización del surf o la exigencia deportiva y poder seguir trabajando con los patrocinios o las personas que confían en mí.

 

¿Cómo ha cambiado esa relación con los patrocinios?

 

Cada vez hay mejores surfistas que a la vez están más limitados en cuanto a tiempo o medios. Si tú destinas unos medios a competir no los dispones para hacer un viaje o crear un contenido para las marcas. Igual antes era un solo camino o veíamos desde la nueva perspectiva que lo que funcionaba era una cosa. Ahora probablemente sean otras cosas las que funcionen. Antes eran freesurfers y competidores y las marcas tenían muchos más medios. El mercado ha cambiado y eso se nota en que la presencia de las marcas que han estado toda la vida ya no están o ya no es la presencia que tenían antes.

 

 

Hace poco publicabas un nuevo contenido en busca de un swell en Lanzarote, ¿cómo surgen estas ideas?

 

Estos viajes han surgido desde el puro impulso. Estar en casa y tener la vista puesta en donde puede haber mejores condiciones. Ver los medios de los que dispongo y tomar la decisión de salir hacia eso; buscar las mejores olas haya donde estén y siempre buscar ese equilibrio. 

 

El vídeo que salió de Lanzarote surgió el día anterior. Estaba volviendo de un swell buenísimo en Hossegor y estaba mirando la previsión de casa para el resto de la semana, pero, había empeorado. Tenía un ojo puesto en Lanzarote sabiendo qué tenía potencial e iba a haber nivel en el agua, que es donde yo considero que tengo que estar para mejorar, así que no lo pensé dos veces. La única manera de seguir creciendo es asumir unos riesgos… me puede salir mal el viaje, me puedo lesionar y comprometer el resto de la temporada. Pero, este es un deporte que requiere eso, toda la preparación que estoy haciendo es para estos momentos. ¡Ser él mejor surfista posible y estar en la mejor forma posible!